Uniéndose a Siva

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Chiti Kramika Vikasa

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La Evolución de la Conciencia

Guiando al kundalini a través de los seis chakras, con un único propósito ellos dirigen la mente, sentándose inmóviles, como un poste de madera, insensibles al tacto o al sonido. A los yoguis sabios que establecen su meta elevada, el Señor les otorga Su gracia.

Tirumantiram 1457

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Los chakras por debajo de la columna vertebral son el origen del miedo, la ira, los celos, la confusión, la malicia y todos los instintos básicos. Aquí un buscador ve el mundo inferior, tratando de sellar su flujo de energías a través de sadhana y girando al Señor Shiva. Este cierre se puede hacer solamente en un cuerpo físico.

 

Lunes
LECCIÓN 288
Ida, Pingala, Sushumna

En la cosmología mística, los siete lokas, o mundos superiores, corresponden a los siete chakras superiores. Los siete talas o mundos inferiores, corresponden a los chakras ubicados por debajo de la base de la médula espinal. El ser humano es entonces un microcosmos del universo, o macrocosmos. La médula espinal es el eje de su ser, así como Monte Meru es el eje del mundo, y los catorce chakras son los portales hacia los catorce mundos o regiones de conciencia. La fuerza de vida actinódica dentro de la corriente sushumna circula hacia arriba y hacia abajo de la médula espinal y se hace muy poderosa cuando las fuerzas ódicas ida y pingala están equilibradas. Entonces, el ser humano se vuelve completamente actinódico. De alguna manera no siente que él posea un cuerpo en ese instante en particular. Siente que está simplemente suspendido en el espacio, y en esos momentos sus chakras visuddha y anahata se hallan rotando y vibrando. Cuando, a través de la práctica de estados de contemplación muy intensos y no interrumpidos, él se funde en estados de superconciencia, ida y pingala forman un círculo. Ellas se encuentran, y las glándulas pituitaria y pineal en el tope de la cabeza, también unen sus energías. Esto produce un samadhi profundo. La glándula pituitaria se despierta primero y a través de su acción estimula a la pineal. La glándula pineal envía una chispa a la pituitaria, y la puerta de Brahman, Brahmarandhra, se abre, para no cerrarse nunca más. Una vez vi el sahasrara sobre un largo tallo por sobre mi cabeza, cuando estaba en Nueva York en 1953 o 1954.

La fuerza sushumna también se une, y el kundalini, que en estos momentos se halla yendo hacia arriba y hacia abajo por la médula espinal como un termómetro, como el cuerpo de calor-fuego de la persona, se eleva hasta el tope de la cabeza, y la persona trasciende la conciencia y se vuelve el Ser y tiene su total Realización del Ser, nirvikalpa samadhi.

El nadi ida es de color rosa. Fluye hacia abajo, está predominantemente del lado izquierdo del cuerpo y es de naturaleza femenina-pasiva. El nadi pingala es de color azul. Fluye hacia arriba, está predominantemente en el lado derecho del cuerpo y es de naturaleza masculina-agresiva. Estas corrientes nerviosas son, como diríamos, tubos psíquicos, a través de los cuales el prana fluye desde su fuente central, Siva. El prana fluye hacia abajo a través de ida y hacia arriba a través de pingala, pero dibujando una figura de ocho. El nadi sushumna describe una línea recta desde la base de la médula espinal hasta el tope de la cabeza. Ida y pingala dan vueltas en espiral alrededor de sushumna, y se cruzan en el tercer chakra, el manipura, y en el quinto chakra, el visuddha, y se juntan en el sahasrara. Esto significa que existe un mayor equilibrio de ida y de pingala en el centro de la voluntad de la persona, o chakra manipura, y en su centro del amor universal, o chakra visuddha, y por supuesto en el gran centro sangam, el lugar de encuentro de los tres ríos, el chakra sahasrara.

El nadi sushumna, que fluye hacia arriba, es el canal del kundalini sakti, que es de color blanco. Es la energía más fresca, ya que el blanco contiene a todos los colores. Cuando esto sucede, lo cual sucede casi imperceptiblemente bajo el ojo observador del guru, la conciencia se expande lentamente. El novicio sólo nota su delicado y al mismo tiempo poderoso desarrollo espiritual, cuando mira hacia atrás al momento en que comenzó a llevar a cabo sus prácticas. Ahora él ve cómo era su vida entonces y cómo ahora la humildad de su alma ha dominado al ego externo.

A través de ejercicios respiratorios, de meditación y de la práctica de yoga hatha, ida y pingala, o las fuerzas ódicas pasiva y agresiva, se equilibran. Cuando ellas se equilibran, los chakras rotan todos a la misma velocidad. Cuando los chakras rotan a la misma velocidad, no atan más la conciencia al mundo ódico; la toma de conciencia del ser humano es entonces liberada automáticamente y la persona se vuelve consciente de los mundos actinódico y actínico.

Aquellos chakras en el cruce de ida y pingala, son los chakras más físicos, mientras que aquellos que son salteados, están activados por la misma sushumna. Cuando el yogui está realmente centrado en su interior, ida y pingala se mezclan en una línea recta y se unen en sushumna, dando energía a los siete chakras, y en el alma más vieja, lentamente, muy lentamente, comienza a activar a los siete chakras por arriba del sahasrara. Cuando esto sucede, la persona no piensa más, sino que ve y observa desde el chakra ajna entre los dos ojos. La persona se halla totalmente viva conscientemente, o superconsciente. Es sólo cuando su ida y su pingala comienzan de nuevo a funcionar normalmente, que la persona comienza a pensar acerca de lo que vio.

Martes
LECCIÓN 289
El Kundalini Descontrolado

Existen tres canales a través de los cuales las energías espirituales del kundalini pueden elevarse. El que se recomienda es el sushumna. Los otros dos deben ser evitados. Cuando el kundalini sakti fluye por afuera del nadi sushumna en y a través del nadi ida en el lado izquierdo de la médula espinal, que corresponde al sistema nervioso simpático izquierdo, se fragmenta en otras corrientes nerviosas más pequeñas y más sensibles conectadas con los órganos del cuerpo físico. Produce calor dentro de la anteriormente fresca red nadi. La persona se vuelve demasiado emocional, de naturaleza femenina, habla demasiado, a menudo le hieren los sentimientos, llora ante la menor provocación y se trenza en esquemas de comportamiento que se centran alrededor del Yo personal. Estas personas siempre quieren ayudar a otros, pero muy raramente lo hacen. Este calor, a pesar de ser astral, es sentido en el cuerpo físico en el plexo solar. Cuando se la provoca, la persona se enfurece, y siempre está lista para defender su ego personal para quedar bien parado. De manera similar, cuando el poder de la serpiente fluye hacia arriba a través del nadi pingala y en la red nerviosa simpática del lado derecho del cuerpo, la persona se vuelve demasiado intelectual, de naturaleza muy masculina, habla poco, tiene nervios de acero y patrones que se centran alrededor de conquistar a los otros a través de debate intelectual. Es susceptible a silencios prolongados, conteniendo sus emociones, y a esquemas de comportamiento secretos para estimular o satisfacer sus deseos básicos. En otras palabras, no es abierto, ni sonriente, ni amigable, ni compasivo. En cualquiera de los casos, el kundalini sakti elevándose a través de ida o de pingala, puede ascender sólo hasta el chakra visuddha y no más. Aquí se produce el "impasse".

El direccionamiento equivocado del kundalini sucede más a menudo con los menos disciplinados, aquellos más ansiosos de logros en la vía rápida, aquellos que no se hallan bajo la observación cuidadosa del satguru. Y sin embargo el novicio siente un despertar dinámico de poder. Este calor producido por el kundalini sakti fluyendo a través de cualquiera de estos dos nadis del sistema nervioso simpático, puede producir y a menudo produce sacudones en el cuerpo, en la médula espinal y en el cuello.

Demasiado a menudo, los sacudones del cuerpo, la doblada del cuello y la actitud de "yo lo sé todo", son tomados como experiencias altamente espirituales e incluso revalidadas como tales por algunos maestros. Pero es como si estuviéramos manejando un auto por un camino rocoso, pensando que es una autopista perfecta. Por cierto que es una experiencia inusual, construyendo el ego personal en algo en lo cual supuestamente no se debe hacer. Cuando esto le sucede a un devoto, el guru o swami sabio recomienda que todas las prácticas espirituales sean inmediatamente interrumpidas. Se debe interrumpir el japa. Se debe interrumpir todo pranayama excepto por la simple regulación de la respiración. La lectura de las escrituras se debe interrumpir, cualquier clase de culto debe ser interrumpido. Se debe interrumpir todo aquello que no sea sano y humilde yoga karma, tal como limpiar baños. Se debe fomentar el cultivar la comida. Los pies descalzos sobre la tierra, al mismo tiempo que las manos estando en contacto con la tierra, es la mejor manera de hacer descender al desenfrenado kundalini hasta el chakra muladhara. Una vez que ha descendido, puede ser dirigido hacia arriba a través de la corriente correcta, pero solamente cuando el devoto no posee esquemas conflictivos en su vida.

A diferencia del movimiento sutil del poder de la serpiente divina a través de su canal apropiado, el nadi sushumna dentro de la médula espinal, la dirección equivocada puede reflejarse en un cambio dramático en la naturaleza de la persona, convirtiendo el que era un humilde estudiante en un gigante de ego, ya sea demasiado emocional y egocéntrico o intelectualmente discutidor; estos dos tipos no son en manera alguna auto-reflexivos. De quien una vez quizás fue una persona tímida, tenemos ahora un "Ven a mí, yo te sanaré, yo te repararé, te daré inspiración, porque yo estoy consciente," o aún peor "Yo estoy iluminado." Una vez que el ego espiritual ha dominado, algunos hasta declaran haber logrado más que su maestro. Ellos no necesitan más un maestro. Para ellos el guru se halla en el interior, en sus acaloradas discusiones, en sus desbordes emocionales y en las posiciones desafiantes, y eventualmente tiene su efecto en su propia persona.

Miércoles
LECCIÓN 290
Sofocando al Kundalini

Como dice el dicho, "Todo lo que sube debe bajar." Esto es especialmente cierto en lo que se refiere al kundalini sakti moviéndose a través de cualquiera de los equivocados canales, donde puede producir una dolencia – incomodidad físicamente, emocionalmente, intelectualmente y astralmente –de la cual ningún doctor puede desentrañar la causa y a la cual tampoco puede curar. A medida que se eleva, en las distintas intersecciones, el kundalini sakti, o poder de la serpiente, ataca los órganos de la vecindad del chakra por el cual está atravesando, picando y envenenándolos en el nivel astral. A medida que asciende, cada uno de los órganos astrales es afectado y se siente como una dolencia física. Esto a menudo se refleja como un problema sintomático en los riñones, luego problemas estomacales y más tarde problemas cardíacos y dificultades con la tiroides. En cada intersección, el doctor estará perplejo por la dolencia, incapaz de encontrar una causa médica, y luego doblemente perplejo cuando ese problema desaparece y el próximo surge. A pesar de que diferentes tratamientos y múltiples exámenes son efectuados, la causa del problema en general no es detectada.

El devoto que se halla atravesando esta experiencia, a menudo desafía la voluntad de su satguru, con lo cual es dejado a su propia suerte, ya que esto está incluso más allá de la habilidad del guru de poder ayudarlo o guiarlo en adelante. La regla es que el guru da nueve pasos hacia el devoto, por cada paso que éste da hacia el guru en forma humilde, cooperativa y deseosa. Cuando el devoto se resiste, comienza a discutir y a desafiar la voluntad del guru, esta es la señal para el satguru de replegarse, la señal mística de que su noveno paso ha sido dado. Si él da el décimo, el está entrando sin ser bienvenido y se enmaraña cuando da el undécimo y duodécimo paso. Replegarse a esta altura causaría insolicitado karma de herida, dolor y angustia. Así que la sabiduría de los antiguos es "Por cada paso que el devoto da hacia el guru, el guru da nueve hacia el devoto."

Entonces, Sri Sri Sri Visvaguru Maha-Maharaj-ji interviene y toma el control, y el aspirante que falló ya sea se corrige debido a las fuerzas de las circunstancias y abandona su búsqueda espiritual por razones financieras o por otras razones, o se desvía del camino espiritual hacia el ashram de Visvaguru, que se llama Bhogabhumi, lugar de placer (otra forma de denominar la Tierra). Es el ashram más grande de todos. Aquí los seguidores aprenden por sus propios errores y crean nuevos karmas a ser experimentados en otra vida.

Para evitar estos problemas y otros peores, el kundalini sakti, debe ser llevado hacia abajo completamente – despacio, no abruptamente, de lo contrario la persona puede volverse suicida – todo el camino hacia la base, hacia el chakra muladhara, y luego ser redirigido hacia arriba por el canal apropiado. Debido a que el orgullo siempre viene antes de la caída, la caída del orgullo espiritual es otra de las dolencias, la picadura final de la serpiente, y a medida que el veneno fluye a través de los órganos, sufrimiento temporario físico, mental y emocional es la consecuencia.

Jueves
LECCIÓN 291
Esforzándose y el Dharma Propio

Muchos buscadores quieren un futuro de afluencia económica, de familia y de amigos y también quieren la más alta iluminación espiritual. Esto es su orgullo espiritual estableciendo un esquema irreal. Debemos recordar que después que uno renuncia al mundo al entrar en los chakras superiores – el mundo renuncia al individuo. Si éste se halla casado, el no pude cumplir más con su purusha dharma, sus deberes de familia. No puede mantener un empleo que le ofrece beneficios para el futuro. Su perspectiva del mundo y su avance en el mundo han sido cambiados para siempre. Así como un barco flota a la deriva en el océano si no posee un timón, de la misma manera vaga el alma que no ha sido preparada y que ha forzado su entrada, sin haber sido invitada a través de la iniciación, en los dominios de los santos y de los sabios de Sanatana Dharma. Esta es la razón por la cual los jefes de familia y todos los que no han sido adecuadamente preparados, enseñados y examinados por un preceptor competente, no deben dedicarse profundamente a las prácticas de yoga raja o yoga kundalini.

Si ellos son susceptibles a enojo, celos, desprecio y venganza, deberán abstenerse de llevar a cabo los yogas de japa y meditación exploratoria. Esto simplemente intensificaría y cargaría con prana a los chakras inferiores que dan origen a fuerzas demoníacas. En su lugar, deberían llevar a cabo el siempre curador vasana daha tantra y restringirse a yoga karma, tal como limpiar en el templo y alrededor del templo y recoger flores para los pujas. Se recomiendan estas simples acciones de charya, pero no deben extenderse a culto intenso.

Entonces, y sólo entonces, sus vidas estarán en perspectiva con la filosofía del Sanatana Dharma y comenzarán a hacerse uno con el universo perfecto de Siva. La puerta que conecta con los siete chakras por debajo del muladhara, brahmadhvara, será entonces obturada a medida que sus patrones de experiencia se asientan en la perspectiva tradicional de cómo debe ser la vida y cómo debe cada individuo comportarse.

El uso de drogas es otro peligro presagiante, ya que ciertos estimulantes pueden poner en movimiento el kundalini simultáneamente en las regiones superiores y en las inferiores. Por ejemplo, cuando aquél que usa drogas, como un intruso, fuerza su entrada en la experiencia de la unidad del universo, la totalidad del ahora y del ser-total, alcanzando el cuarto chakra, anahata, en forma simultánea, aquellos centros por debajo del anahata en secuencia alternada son estimulados al mismo tiempo, queriendo significar con esto el centro svadhishthana y el primero, el tercero, el quinto y el séptimo por debajo de la base de la médula espinal – los centros de la razón, del temor, de los celos, del egoísmo y de la maldad. Un cambio de temperamento notable dificulta la vida de aquella persona que se basa en drogas, en el transcurso de su existencia. Unicamente prayaschitta severo, penitencia, puede establecer el curso hacia la cura espiritual.

Viernes
LECCIÓN 292
Los Siete Centros de los Instintos

Los siete chakras o talas, por debajo de la médula espinal hasta los pies, son los asientos de la conciencia instintiva, el origen del temor, la furia, los celos, la confusión, el egoísmo, la ausencia de conciencia y la malicia.

El primer chakra por debajo del muladhara, llamado atala y localizado en las caderas, gobierna el estado de mente llamado temor. Cuando alguien se halla en esta conciencia, teme tanto a Dios como a las otras personas – incluso así mismo en ocasiones. En el chakra por debajo de ese, llamado vitala y localizado en los muslos, predomina la furia. El enojo surge de la desesperación o de la amenaza a la voluntad de uno. Cuando las personas se hallan en la conciencia de este chakra, ellas se hallan enojadas hasta con Dios. Con su cólera, a menudo atacan a aquellos a su alrededor, dejando a su paso una estela de sentimientos heridos. De la furia continua, surge un sentimiento persistente e incluso sofocante de resentimiento.

El tercer chakra por debajo del muladhara, llamado sutala y localizado en las rodillas, gobierna los celos. Los celos son en realidad un sentimiento de insuficiencia, inferioridad e impotencia. Cuando se combina con la furia, produce reacciones terribles en el sistema nervioso del cuerpo astral. Cuando las personas se hallan en la conciencia de este chakra, a menudo niegan la existencia de Dios y son conflictivamente combativos con los demás.

El cuarto chakra por debajo del muladhara, llamado talatala, y localizado en las pantorrillas, gobierna la voluntad instintiva, el deseo de poseer en vez de dar, de avanzar sobre otros sin importar cuáles puedan ser sus reacciones, todo por el beneficio propio. Cuando las personas se hallan en la conciencia de este chakra, proclaman la existencia del progreso material sobre todo lo demás. Ambición, engaño, coerción, soborno y lujuria prevalecen. Este es realmente un estado de mente de "la ley del más fuerte."

El quinto chakra por debajo del muladhara, llamado rasatala, está localizado en los tobillos, y es el verdadero hogar de la mente instintiva. Cuando las personas se hallan en la conciencia de este chakra, ellos ven el bienestar del "número uno" primero, "mi y yo." Memoria, razonamiento, voluntad, pensamientos, sentimientos y acciones sin conciencia son los factores motivadores aquí, gobernados por la furia y el temor. Relativo a este estado de mente, los celos, la furia y el temor se experimentan como estados de conciencia intensos e incluso elevados. Existen hasta filosofías que han sido concebidas basadas en los estados de conciencia experimentados en estos cinco chakras por debajo del muladhara. Una de estas es el existencialismo. Muchos ateos verdaderos residen en el quinto chakra por debajo del muladhara, y es en este chakra que una gran parte de la conciencia de masas reside en este Kali Yuga.

Existen aún dos chakras más, por debajo de éste. El sexto chakra por debajo del muladhara, llamado mahatala y localizado en los pies, es "robo sin conciencia." Las personas que viven aquí sienten que "el mundo las debe mantener." Ellos simplemente toman lo que consideran que es de ellos de todas maneras. El séptimo chakra por debajo del muladhara, llamado patala y localizado en las plantas de los pies, gobierna la venganza, el asesinato por el simple asesinato, la maldad expresada a través de la destrucción de los bienes, de las propiedades, de las mentes, de las emociones y de los cuerpos físicos de los otros. El odio reside aquí. La maldad reina suprema. Esta es la conciencia de los terroristas y de aquellos que apoyan a los terroristas con vigor y que disfrutan desde lejos sus matanzas, sus violaciones y sus actos tortuosos. La razón influye muy raramente en aquellos que viven en este estado de mente.

Desde aquí, desde el mismo fondo, no se puede ir más abajo. La única salida es hacia arriba. La evolución tiene su efecto trayendo la conciencia de estas almas desenfrenadas hacia arriba, hacia el ego personal y hacia alguna resemblanza de autoestima, y luego hacia arriba en la habilidad de estar celosos, luego hacia arriba en la conquista de sus temores y recuerdos de acciones pasadas, temiendo que estos eventos horrendos puedan repetirse, y luego finalmente ascendiendo hacia la memoria y la razón, luego a la fuerza de voluntad del chakra manipura. Aquí se pueden volver religiosos, arrepentidos, resistentes a tener que volver a enfrentar las experiencias que ven constantemente hacia atrás y por las cuales lloran y sienten remordimiento. Sí, existe sólo un camino. Va hacia arriba o va hacia abajo.

Aquí, en el chakra manipura, que se coordina con el chakra de la memoria, se hallan listos para practicar prayaschitta, penitencia, lo que sea para extraer la emoción de esos recuerdos que se hallan enmarañados profundamente en el subconsciente. Este es un proceso penoso. Pero la evolución hace necesario que sea vivido. Una vez que se lleva a cabo – y prácticamente hablando no se logra fácilmente y tampoco se logra siempre – mejora el curso de los pranas que fluyen a través del subconsciente, del sub de la subconciencia y de la sub-superconciencia, para ellos mismos, para sus familias, para sus ancestros, y su progenie, muchas generaciones para atrás y muchas generaciones hacia el futuro.

Para continuar con la explicación, aquellos que están bien asentados en conciencia en estos siete chakras por debajo del muladhara, no están interesados en religión. Ellos son irreverentes y niegan la existencia de Dios. Es aquí donde temores supersticiosos en general predominan. No hay reglas. No hay conciencia. Los diversos estados interrelacionados de conciencia que se encuentran en estos siete chakras, favorecen el caos, la confusión, los sentimientos de desaliento y desesperación – todos estados de mente adharmicos. Estas son las frecuencias de vibración de la mente instintiva por debajo del muladhara, donde el Señor Ganesa se sienta en toda su majestuosidad.

Sábado
LECCIÓN 293
La Conciencia y los Chakras

El obtener estabilidad en cualquiera de los chakras por arriba del muladhara, da cierto control sobre los chakras relacionados por debajo del muladhara. Por ejemplo, el muladhara tiene poder sobre el segundo, cuarto y sexto chakra por debajo de la base de la médula espinal, los centros del enojo, la confusión y la ausencia de conciencia. Manipura, el tercer chakra, tiene poder sobre el muladhara y sobre los mismos centros Narakaloka en una forma aún más expansiva. El centro de la razón, svadhishthana, segundo chakra, controla los centros del temor, de los celos, y así sucesivamente. El chakra del conocimiento, de la visión a través de la mundanería – anahata – el cuarto centro por arriba del muladhara, controla el chakra de la razón, y los centros del temor, de los celos, de la auto-preservación egoísta, y así siguiendo.

En verdad, todos los chakras se hallan en funcionamiento en todos, ya que todo el mundo tiene voluntad, memoria, razonamiento y demás. Pero cada alma tiene su centro de operaciones. La persona ahimsa que opera en el chakra anahata, no dañaría nunca a otros porque percibe la unidad de todo. La persona que vive en el chakra ajna por arriba, no dañaría nunca a otros, porque está inmersa en amor divino. El sitio base del terrorista, que disfruta, se regocija y se enorgullece y recibe medallas de honor por su desprecio de los derechos humanos, es el chakra patala, en el fondo. La persona promedio, y esto es lo que la hace promedio, funciona predominantemente en unos seis chakras. Estos seis serán aquellos por debajo del muladhara para alguien para quien el temor es su punto elevado. Tres de esos seis son los elementos nutrientes.

Los siete chakras superiores rotan en la dirección de las agujas del reloj, y esta rotación crea el santi, o paz que siempre crece, en el individuo dominado por ellos. Los siete inferiores rotan en sentido contrario a las agujas del reloj, y esto produce una confusión que siempre aumenta en la persona así afectada. La parte más vulnerable del desarrollo espiritual es cuando uno se halla en los chakras elevados – por ejemplo voluntad y razón – y tiene uno o más chakras inferiores abiertos también. Esto significa que un grupo de chakras se halla rotando a favor del reloj, y otro grupo se halla rotando en sentido contrario a las agujas del reloj, lo que implica grandes oscilaciones de temperamento, euforia, depresión, auto-adulación, auto-condena. Entonces, brahmadvara, el pasaje al Narakaloka justo por debajo del muladhara, debe ser obturado de modo que se vuelva imposible para los temores, los odios, las furias y los celos, manifestarse. Una vez que esto comienza a tener lugar, el chakra muladhara se estabiliza, y el renegado se vuelve un devoto del Señor Ganesa. No puedes venir al Señor Ganesa con amor y respeto, si eres una persona que se enoja o que tiene celos. Esa es nuestra religión.

A medida que la toma de conciencia fluye a través de los primeros tres chakras superiores, nos hallamos en los patrones de memoria y razón. Vemos el pasado y el futuro vívidamente y residimos en forma intensa en las áreas consciente y subconsciente de la mente. Cuando la toma de conciencia fluye a través de los chakras anahata y visuddha, nuestro punto de vista cambia. Comenzamos a vernos como el centro del universo, ya que estamos viendo hacia fuera y viendo al mundo externo desde nuestro interior. Vemos a la fuerza primordial dentro de nosotros y vemos que esa misma energía está en todo y a través de todo.

Los chakras también se relacionan con nuestro universo inmediato. Coloca al sol en el centro, representando la luz dorada de sushumna. La Tierra es la mente consciente; la luna es la mente subconsciente. Las frecuencias vibratorias de los planetas están entonces relacionadas con los siete chakras; el primer chakra, muladhara, con Mercurio; el segundo chakra, svadhishthana, con Venus; el tercer chakra, manipura, con Marte; y así siguiendo. De esta manera, si sabes un poco de astrología Védica, puedes comprender las relaciones de la influencia de los planetas con la formación de la naturaleza del individuo, y cómo estos distintos chakras, entran en acción, unos más fuertemente que otros, dependiendo de los signos astrológicos, ya que ellos tienen las mismas frecuencias de vibración que los planetas. Ahora entonces puedes ver como todo está relacionado.

A través del conocimiento de los chakras, puedes observar a las personas y ver en qué estado de conciencia se hallan funcionando. Es útil saber que todas las almas son internamente perfectas, pero que se hallan funcionando a través de uno u otro de los centros de fuerza la mayoría del tiempo, y que estos centros de fuerza determinan sus actitudes, sus experiencias, cómo reaccionan a las experiencias, y mucho más.

Domingo
LECCIÓN 294
Cerrando el Portal Hacia los Dominios Bajos

Cuando en el momento de la muerte entras en el plano astral, estás solamente en la conciencia de los chakras que estuvieron más activos en ti durante la ultima parte de tu vida y, de acuerdo a eso, funcionas en uno de los lokas astrales hasta que el ímpetu de este chakra sea extenuado. Son los chakras los que producen el cuerpo. No es el cuerpo el que produce los chakras. Como tienes catorce chakras, al menos tres son los más poderosos en cada individuo – por ejemplo memoria, voluntad y cognición. Cada chakra es una vasta área de la mente, o una extensa área colectiva de muchos, muchos estratos de pensamiento. Generalmente, la mayoría de la gente que se asocia, intelectualmente o espiritualmente, se hallan fluyendo a través del mismo chakra predominante, o muchos de ellos colectivamente. Por consiguiente, piensan igual y comparten la misma perspectiva de ver a la vida.

Los chakras existen como ganglios nerviosos que tienen un impacto directo en los órganos del cuerpo físico, como ganglios nerviosos psíquicos en el cuerpo astral y como discos rotantes de conciencia en el cuerpo del alma, anandamaya kosa. El poder de cerrar los chakras bajos – de obturar el pasaje al extremo inferior de sushumna – existe sólo cuando el alma se halla encarnada en un cuerpo físico. Los catorce chakras más los siete por arriba y por dentro del sahasrara, están siempre allí. Depende del individuo el elevar la conciencia de uno a otro a través de pensamiento correcto, palabra correcta y acción correcta, mostrando remordimiento por los errores cometidos, llevando a cabo sadhana regularmente, culto, peregrinaje y haciendo caso a otras instrucciones personales por las que el satguru o swami haya guiado a la persona. Todo esto y más, le enseña a los pranas de la conciencia, y aún más importante, a la toma de conciencia individual, el arte de fluir hacia arriba a través de los centros elevados, mediante el proceso de cerrar los inferiores.

El desarrollo espiritual no es un proceso de despertar los chakras elevados, sino de cerrar los chakras por debajo del muladhara. Una vez que esto tiene lugar, la conciencia del aspirante se expande lentamente a los chakras elevados, que siempre están allí. Lo único que mantiene los chakras inferiores cerrados es sadhana, japa, culto y trabajar dentro de uno mismo con regularidad. Esto es demostrado por el hecho de que hasta los grandes yoguis y rishis que han llegado a los chakras elevados, continúan haciendo más y más sadhana. Ellos están constantemente trabajando para mantener las fuerzas fluyendo a través de los centros elevados de modo que los bajos no reclamen la toma de conciencia.

Todo esto puede parecer muy complejo y esotérico. Pero estos son aspectos de nuestra naturaleza que usamos todos los días. Usamos nuestros brazos y manos todos los días sin pensar. Si estudiamos la fisiología de las manos, encontramos capa tras capa de interrelaciones intrincadas de tejidos, células, plasma. Examinamos la ingeniería del sistema estructural óseo y de las articulaciones, la transmisión de energía del sistema muscular, la bioquímica del crecimiento y de la regeneración, la biofísica de la acción y reacción nerviosas. De repente, una parte simple y natural de la vida humana, la función de las manos, parece compleja. En forma similar, usamos las distintas funciones de conciencia, los chakras, todos los días sin siquiera pensar en ellos. Pero ahora los estamos estudiando en profundidad para obtener una comprensión más madura de su naturaleza.

En realidad, existen más chakras por arriba y dentro del sahasrara. La literatura Budista, cita treinta y dos chakras por arriba. La tradición Hindú Agámica cita siete niveles de dimensiones sutiles de paranada, el primer tattva, como es cantado diariamente por cientos de miles de sacerdotes durante pujas en templos alrededor del mundo. Sus nombres son: vyapini, vyomanga, ananta, anatha, anasrita, samana y unmana. Yo he experimentado estos chakras o nadis elevados como lo son en esta región sutil, como conglomerados de nadis. Estos centros de fuerzas no son exactamente chakras, ya que no están conectados con ningún órgano o parte del cuerpo físico. Son chakras o nadis del cuerpo del alma, que cuando se desarrollan, como resultado de muchas, muchas muchas experiencias Parasiva, descienden lentamente al cuerpo mental y al cuerpo astral. El cuerpo mental se vuelve permanentemente diferente en su perspectiva filosófica, y el cuerpo astral comienza a absorber y a ser transformado por el cuerpo dorado, o svarnasharira.